Si de por sí la salud mental es una gran área inexplorada para muchos de nosotros, decir que el factor medioambiental es determinante en la originación de muchas enfermedades mentales, puede parecer poco creíble.    Sin embargo, afirmar que la contaminación medioambiental afecta a nuestra salud es algo que, tras varios estudios científicos y noticias que exponen este análisis, la mayoría de gente vamos teniendo cada vez más claro.  Pero antes de entrar en profundidad, es importante entender el contexto. Si tienes interés por saber cómo la contaminación medioambiental puede afectar a tu salud mental, sigue leyendo (emoji dedo abajo)  

¿Cómo influye la contaminación del medio ambiente en nuestra salud mental?

  No cabe duda que la contaminación medioambiental puede repercutir en diferentes aspectos de nuestra vida. Una de ellas puede ser la salud física. En la actualidad, los alimentos que ingerimos son el canal por el que llegan a nuestro organismo partículas contaminantes.    Pero lo que no solemos tener en cuenta, es que esta contaminación no solo perjudica nuestra salud física, sino también a la gran olvidada: la salud mental.    De un tiempo a esta parte, apenas se tenían en cuenta afecciones muy comunes en toda la población como es la ansiedad, el estrés, la hiperactividad, la bipolaridad, el TDH, entre otras.    Muchos de estos síntomas a lo largo del tiempo se han normalizado en la sociedad e, incluso se calificaba a la persona que lo padecía como “rara”.  

Pero ¿Y si te dijera que la contaminación ambiental está muy ligada a muchas patologías relacionadas con la salud mental?

Aunque los estudios sobre esto son bastante recientes, cada vez hay más evidencias de que efectivamente la contaminación ambiental es un factor muy determinante para el bienestar mental.  Si lo analizamos detenidamente, todos podemos darnos cuenta de que el modo de vida de las personas  está sufriendo unos cambios muy rápidos y bruscos.    Cada vez perdemos más la perspectiva de lo que somos y de dónde venimos. Lo estudiamos en los libros, pero parece que cada vez nos identificamos menos con la naturaleza.    Estamos transformando tanto nuestro entorno que parece que lo humano no es naturaleza, cuando no debemos olvidar que somos seres biológicos. Y, es ahí donde aportamos un tono reflexivo para contemplar la natura leza desde otra perspectiva y llegar a entender que no estamos separados de la naturaleza, sino que somos parte de ella.   Ahora, podemos empezar a entender que no es tan descabellado que el medio ambiente y la salud mental vayan de la mano.  

La eco-ansiedad: la nueva enfermedad generada por la contaminación ambiental

  Hemos crecido con la idea de que todo es desechable, como si el planeta tuviera espacio infinito y que no importa dónde dejamos los residuos que generamos. Hoy en día, vivir en la era de la inmediatez y lo descartable se ha puesto en jaque. Solo hay que ver las consecuencias del cambio climático. Al desechar lo que se considera basura plástica, entre otros materiales que se generan, los océanos reciben entre 8 y 12 millones de toneladas de plástico por año y los efectos de la crisis climática se acentúan cada segundo, afectando al medio ambiente y, cada vez más, a nuestra salud tanto física como mental.     

Estudios recientes advierten sobre un gran número de cargas psicológicas negativas en niños, jóvenes y adultos de todo el mundo.

Aunque aún no se trata de un trastorno de salud mental reconocido como diagnóstico médico, desde el año 2017, la American Psychology Association define a estas cargas psicológicas negativas bajo el nombre de eco ansiedad (o ansiedad climática), caracterizándose como “el miedo crónico ante la catástrofe medioambiental”.   Los hallazgos señalan que nuestro desarrollo emocional se puede ver afectado por diferentes factores. Para hacernos una idea, el 50% deviene de la genética y 50% de factores ambientales. Teniendo en cuenta que los efectos de la crisis climática son cada vez mayores, desde Gravity Wave nos preocupan por investigar y aportar desde nuestro lado soluciones ante este cambio climático.

Sin salud mental y medioambiental, no hay salud

  Hablar de la salud mental aquí y en muchos lugares del mundo es un tabú. Los retos que abordamos desde nuestra labor son varios pero uno muy importante es el de romper con el tabú de tratar la salud mental. A este reto, se ha sumado Centro Albea, una clínica de psicología de Pamplona que cuenta con un grupo de psicólogos y psicoterapeutas especializados en la terapia cognitivo-conductual. Llevan más de 30 años de experiencia en el campo de la psicología, ofreciendo apoyo psicológico constante y personalizado. Su objetivo es promover la máxima calidad de vida y bienestar emocional de todas las personas que acuden en busca de ayuda.   El mencionado Centro se embarca en la misión de abordar el desafío de la contaminación medioambiental. En este caso, combatir la contaminación plástica de los océanos.   

Una colaboración con doble propósito

En la búsqueda de romper estigmas y tabúes sobre la salud mental, junto a nosotros toman el problema desde la solución para limpiar el plástico del mar. Desde la dirección del Centro Albea han acordado con Gravity Wave extraer 1 kilo de plástico del fondo del mar por cada usuario que decida realizar su tratamiento psicológico en el Centro. De esta forma, la clínica se convierte en la primera en el mundo en limpiar 100 kilos de plástico al mes.   Tomar acción por el planeta requiere encontrar nuevas maneras de relacionarnos con el entorno que nos rodea. Y, nos da gusto unir alianzas con este Centro, al que mencionamos como un gran ejemplo de que esto es posible.  

¿Qué acciones desarrollas para combatir los efectos de la contaminación medioambiental en la salud mental? 

¡Te leemos! 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio